“Hay dos formas de aprender ciencia: la mala y la divertida”

Se dice que los niños son muy curiosos, pero que al crecer, dejan de hacerse preguntas. No es el caso de Carlos, Valentín y José. Ellos continúan saciando su curiosidad como estudiantes en la Universidad de Santiago de Compostela.

Los comienzos siempre son de aquellos que tienen el valor de dar el primer paso. Fue así como Carlos de Frías Polo y José Rodríguez Gago empezaron a llevar a cabo sus propias investigaciones científicas. Entonces cursaban secundaria. La pasión y la dedicación en su trabajo fueron inesperadamente recompensadas a nivel nacional e internacional. Ambos consiguieron ser reconocidos como los mejores investigadores jóvenes de su generación. No conformándose con dedicarse a su pasión, la ciencia, cultivan, además, otras facetas. A destacar, el debate de competición y la divulgación científica. Con todo, al mismo tiempo, estudian medicina.

Estudiar biología significa querer descubrir los secretos que entraña la vida, precisamente a esto se dedicará Valentín Estévez Couto. Se unió a Carlos y José poco después de que estos finalizasen sus primeras investigaciones, trabajando ahora juntos en múltiples proyectos. Al igual que ellos, tienen una gran implicación en la divulgación científica.

Fueron esas ganas de “Ir más allá” las que provocaron que los tres fundasen un grupo llamado Scienceffect, en el que más estudiantes como ellos se reuniesen para desarrollar proyectos de investigación e innovación así como actividades de divulgación científica.

Son por tanto, los valores que comparten junto a su gran trabajo en equipo, lo que les permite lograr todos los objetivos que se proponen.